"Se convierten las universidades en liceos grandes"
Jesús Alfonso Omaña, tesorero de la Asociación de Profesores de la Universidad de los Andes, docente de la ULA y de la Universidad Católica del Táchira. |
Esta es la posible tabla de salarios de los profesores universitarios, tras el aumento de 40% dado por el Presidente de la República. |
El deterioro de la academia es una de las grandes preocupaciones de quienes hacen vida en las universidades públicas venezolanas, ante la falta de recursos para la generación de conocimientos, la investigación de diversos fenómenos de interés social, la colaboración con las comunidades, y los insumos e infraestructura necesaria para la preparación de profesionales de calidad.
Más allá del reclamo sobre los sueldos y salarios, que repercuten directamente en el desempeño del docente, existe un problema de fondo, que no se trata de darles transporte, comedor y becas a los estudiantes; beneficios laborales a los trabajadores, y dinero para pagar nómina, y es que muchos universitarios coinciden en afirmar que las universidades las quieren convertir en "liceos grandes", donde únicamente se vaya a dar o recibir clase, y esa no es la esencia de la universidad.
A la fecha, luego de dos semanas del aumento presidencial a los trabajadores universitarios, aún no se cuenta con una tabla de sueldos oficial emanada del Ministerio, ni tampoco con claridad sobre el pago de primas y bonificaciones, solo existe una información extraoficial al respecto.
Para el profesor Jesús Alfonso Omaña, tesorero de la Asociación de Profesores de la Universidad de los Andes, docente del departamento de Evaluación y Estadística de la ULA, y de la Universidad Católica del Táchira, la lucha por el sueldo no es el único ni el más importante frente de batalla de los universitarios, sino también todos esos factores que no permiten crecer como universidad, pues el hecho de que aumente el sueldo no garantiza que crezca la academia, ni la generación de conocimiento, asegura que desde las instituciones se trabaja con mucho esfuerzo para mantener esa calidad.
Omaña cree que hay un factor sumamente grave que la colectividad no ha considerado, y es la necesidad de ampliar la oferta académica para que cada día más gente vaya a la universidad. Sin embargo, a su juicio, si no hay presupuesto para las universidades, se crece en volumen de jóvenes que se quedan sin la oportunidad de estudiar en una universidad pública.
Lo que considera positivo es que se ha generado un espacio de reflexión: "¿cuánto merecemos ganar por la labor que cumplimos?, ¿cuánto invertimos en nuestra preparación?, compra de libros, cursos, talleres. La gente debe entender que es la infraestructura completa de la universidad la que está en juego, tanto el presupuesto universitario, como el presupuesto de los estudiantes, como los recursos para los docentes, es un todo".
--- Recordemos que la universidad es una infraestructura muy grande, que garantiza mucho éxito a nivel social, porque todos cuantos hemos pasado por universidades públicas, ministros, presidentes, cancilleres, hemos tenido la oportunidad de educarnos y tener la vida que hoy tenemos, así debemos garantizarle a nuestros estudiantes que su futuro será mejor. La educación es el mejor regalo que podemos darle a nuestra juventud, y si garantizamos eso tendremos el país que todos deseamos --- señaló el docente universitario.
Coincide con las palabras de varios trabajadores de las casas de estudios superiores, al afirmar que: "la universidad no es solo la formación académica, nos estamos convirtiendo en un liceo grande, es decir, dar el conocimiento que está en un libro, escrito por alguien, y ahí muere la labor, eso no lo podemos permitir. Por el contrario, en la universidad formamos personas con pensamiento crítico y analítico, con conocimientos sólidos, generamos conocimientos, ese debe seguir siendo el norte".
También expresó con amplia convicción Jesús Omaña: "la universidad es ente de desarrollo de la investigación, es ente para diagnosticar la situación actual en la cual se encuentra el estado, es responsabilidad de la universidad ir a la calle y determinar las necesidades de la gente, para luego elaborar un diagnóstico y buscar los mecanismos para la satisfacción de esas necesidades, buscar dentro de lo académico cómo ayudar a solucionar los problemas de la sociedad; todo eso hacemos en la academia, y aunque quieran quitarnos los recursos para tal fin, no lo permitiremos".
"Es grave la situación universitaria"
Admite el rector de la Universidad Nacional Experimental del Táchira que, históricamente, las universidades venezolanas, por su propia magnitud, siempre han tenido problemas presupuestarios; sin embargo, es en los últimos años cuando esos inconvenientes se han agudizado, amenazando incluso con un posible intento de destrucción de la academia como un todo.
Al analizar el panorama general de las casas de estudios superiores, reflexiona Sánchez Frank para afirmar que: "pensar que 40% de aumento de salario a los profesores fue suficiente, es absurdo, con un promedio de inflación de 65%, que se traduce en la pérdida del poder adquisitivo, pero si además se le agrega una devaluación de la moneda de 100%, entonces el aumento del salario debería ser de 125% para los universitarios, por eso no se justifica que un profesor tiempo completo ganaba 1.912 bsf, y ahora va a ganar 2.267 bsf; con eso no se cubre ni la cesta básica".
Aseveró Sánchez Frank que el profesor universitario sigue devaluado, aun frente a los administrativos y obreros de las mismas instituciones, a quienes el aumento les tocó entre 44% y 66%, que también asegura es bienvenido, porque bajo su criterio, en la medida en que aumenten los sueldos y se les proporcione mejor calidad a los universitarios, las cosas irán mejor, y eso debe servir como referencia, para que los profesores continúen su lucha.
--- Hay un fenómeno nunca antes visto, es que nadie quiere venir a dar clase, porque si bien es cierto que el dinero no lo representa todo, es una variable importante en el desempeño de un profesional que debe dedicarse a la generación de conocimientos, y la universidad en ese sentido ha dejado de ser halagadora --- dijo el rector de la Unet.
Así mismo, indicó que en este momento la lucha tiene que ver también con providencias estudiantiles: "porque si analizamos detenidamente, encontramos que 400 bsf de beca tampoco son suficientes; pero hay que saber también que en los créditos adicionales no hay dinero para gastos de funcionamiento, que se han repetido durante los últimos años, y es en ello donde más afectan los índices inflacionarios. Hay universidades que ya han cerrado, como la Unexpo; o como la Ucla, que la semana pasada le quedaban 23 días para funcionamiento del comedor; en condiciones similares también está la Universidad de Carabobo, y no es posible que se haga academia en esta incertidumbre constante".
Denunció que tampoco da el Gobierno nacional aporte para inversión en áreas como infraestructura, laboratorios, dio a conocer que se han entregado informes, y propusieron a los representantes del Ministerio de Educación Universitaria, que la Ley Orgánica de Ciencia y Tecnología sea una herramienta para implementar la actualización de la infraestructura tecnológica, sobre ese aspecto esperan una respuesta pronta y positiva.
--- Todo lo hacemos porque la providencia estudiantil no es solo comedor, transporte y becas, porque si no hay infraestructura tecnológica, la calidad de la educación disminuye, y lo que precisamente necesitamos es calidad desde el punto de vista académico. No es bueno comparar, pero no imagino cómo se forman profesionales en universidades que atienden 6 mil alumnos en dos municipios y solo tienen 10 salones y 10 computadores; en una carrera tecnológica deja mucho que desear. ¿Qué tipo de profesional estamos formando?, seguramente un frustrado --- reiteró el rector de la Unet.
Una aseveración delicada hizo el rector de la Unet, similar a las escuchadas en declaraciones de otros universitarios: "en el caso de la investigación y la extensión, hay recursos demasiado limitados; si no hacemos estas labores, nos transformamos en un liceo grandote, en simples dadores de clases, y ese no es el objetivo de la universidad, que en realidad es la generación de nuevos conocimientos, la actualización de conocimientos, para poderlos aplicar en los propios problemas de la colectividad, una investigación con impacto social, es el deterioro del verdadero sentido de la academia".
En cuanto a algunos beneficios del personal, aclaró el funcionario que: "se dice que se dio dinero para el HCM, pero el de la normativa laboral que ampara a los administrativos y a los obreros, no a los docentes, a quienes tampoco se les dio extensión de beneficios, todo con la única intención de dividir a los gremios que hacen vida en las universidades, pero no podemos caer en esa provocación, porque todos somos parte importante de la comunidad universitaria".
Calificó la situación universitaria como "muy grave", en cuanto a las condiciones para preparar un profesional que salga a la calle a competir y a cooperar con el desarrollo del país: "más cuando no reconocen la realidad, porque el Gobierno trata de mostrarle al común de la gente que ya se resolvieron los problemas con los anuncios presidenciales, pero nada de lo anunciado ha llegado, ni resuelve nada, las universidades están tocando fondo en materia de mantenimiento".
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